¿Es hambre, sed, aburrimiento o ansiedad?
Actualizado: 6 nov 2021
Cada vez que sientes hambre, no necesariamente es que el cuerpo te está avisando que requiere que lo recargues de energía a través de alimentos y la confusión podría generarse por que el centro que regula el hambre, por ejemplo, es el mismo que regula la sed. En esta entrada te contaré cómo identificar las señales del cuerpo y qué significa sentir hambre, porque no siempre traduce lo mismo.
Ansiedad
Seguro has sentido en algún momento un apetito fuera de lo común, repentino y cuyo origen pasa desapercibido. Pues tiene un nombre: alimentación emocional. Se trata de un ataque de ansiedad, ante la que el cuerpo reacciona generando una sensación de hambre con la que se siente la necesidad de llenar un vacío.

Sed
El cuerpo podría hacerte malinterpretar las sensaciones, pudiendo sentir hambre, pero en realidad es sed. ¿Cómo saberlo? Aquí te dejo algunos tips: cuando es sed el estómago no cruje, sino que se genera una sensación en el inicio del sistema digestivo, detrás de la cavidad oral. Adicionalmente podrías sentir la boca seca, la piel también.
De allí la importancia de mantenerse hidratado, no solo porque genera saciedad, sino porque cuando realmente sientas hambre, sabrás identificarla puesto que la sed también puede sentirse en el estómago; de allí la importancia de mantener la regulación de agua en el cuerpo.

Aburrimiento
Es el más fácil de identificar y no solo para ti, sino de repente para tus hijos y así sepas cómo calmarlos.
Si te provoca algo puntual: un paquete, chocolate, hamburguesa determinada, en un momento específico, puede ser aburrimiento. ¿Por qué? Porque el hambre se sacia con lo que haya, no con un antojo.
Consejo: un café, temprano en la tarde, puede aportar saciedad al cuerpo.

Entonces, al sentir hambre…
1. Detente y analiza la circunstancia que te ha hecho ir hasta la cocina, directamente a la nevera o a la despensa.
2. Abre la nevera, pero concéntrate primero en tomar un poco de agua o incluso una infusión, dale tiempo al cuerpo de reaccionar y si el hambre desaparece, entonces comprobarás que solo era sed. Este es un ejercicio que reflejan en su libro Carlos Ríos y Sergio Calderón creadores del movimiento ‘real fooding’.
3. El aburrimiento y la ansiedad, son las principales razones que detonan una mala alimentación, por eso debes buscar actividades que te mantengan ocupado y ojalá que te guste hacer. Si haces homeoffice, procura que el puesto de trabajo no esté cerca de la cocina. Para evitar ‘picar’ y sentir hambre a deshoras, consume alimentos saciantes cuando comas: buenas proteínas, carbohidratos y grasas.
Foto portada: Pexels (Fotógrafo: George Milton).