BLW: jugar con la comida está bien
Actualizado: 6 nov 2021
Si bien a través del juego es que los niños aprenden y que el BLW en gran medida significa aprender a comer jugando, el objetivo de esta metodología no es dejarles los alimentos y que ellos hagan lo que quieran. Se trata de promover la autonomía, la autorregulación, incentivar la exploración, que los niños autodirijan sus comportamientos y aprendan a comer interactuando con los sabores, texturas, olores y colores originales.

No está mal que a temprana edad tu bebé muestre interés por tocar o explorar la comida con sus manos, pero es importante que sepas que la alimentación complementaria (BLW) se puedes empezar a practicar a partir de los seis meses, cuando ya podrá llevar esos alimentos a su boca, bajo ciertos parámetros como que se puedan disolver o triturar con tu paladar, por ejemplo.
El juego y la exploración se complementan en la técnica del BLW, van de la mano.
Puede ocurrir que al principio se perciba a un bebé explorador y juguetón con los alimentos, incluso puede que no se los coma porque está aprendiendo diferentes pasos del proceso, que luego involucrarán la masticación, en la que también explorarán y jugarán, hasta llegar a tragarlos.

No temas aventurarte en un proceso en el que seguramente más de una franela o pantalón se ensuciarán, eso sí, ten en cuenta que los niños no deberían:
1. Lanzar la comida fuera del espacio donde come. Guíale hacia el respeto por los alimentos.
2. Permanecer por más de 20 minutos comiendo.
3. Ser obligados a comerse lo que se le sirve.
Nunca solos, siempre acompañados
Los padres deben acompañar siempre el proceso de la alimentación complementaria y convertirse en coaches para sus hijos, por eso te recomiendo:
· Come con ellos y lo mismo que ellos.
· Explícales qué están comiendo.
· Conversa sobre los alimentos que están explorando.
· No ofrezcas dispositivos digitales para que coman. El centro es la comida y lo demás sobra.

Veamos la alimentación como una obra de teatro, en la que el BLW es el tras bambalinas. Todo lo que hagamos debe girar en función de la comida y alrededor de la misma.
¿Es una moda el BLW?
Una técnica que favorece la salud de los niños, no debería ser vista como una moda y tampoco aplicada porque otros lo hacen.
Pero quiero terminar esta entrada contándote que una investigación de la Universidad de Valladolid sobre el BLW determinó que “podría ser capaz de prevenir patologías crónicas como la obesidad y el sobrepeso infantil. Además, se asocia con un estilo de vida saludable, fomentado por los padres y la participación del lactante en las comidas familiares”.
Mientras que la Revista Sanitaria de Investigación asegura que “los padres que deciden practicar el método BLW con sus hijos, coinciden en una serie de aspectos positivos como son la adecuada autorregulación del apetito por parte del niño, la posibilidad de compartir el momento de la comida con toda la familia, y el mayor desarrollo de habilidades motoras y de relación”.
Esta revista concluye diciendo que “los padres también coinciden en que este método es más placentero y disminuye la ansiedad frente al método tradicional de alimentación complementaria, al ser considera un método más natural y mejorar la relación del niño con la comida”.
Foto portada: Freeimage.me (Altphotos).
Fotos BLW: Freepik (1), Freepik (2), Freepik (3).
Referencias usadas en este blog:
https://uvadoc.uva.es/bitstream/handle/10324/31593/TFG-L2091.pdf?sequence=1&isAllowed=y
https://www.revistasanitariadeinvestigacion.com/revision-sistematica-baby-led-weaning/